Por qué las tres Internacionales no pudieron ponerse de acuerdo hace un siglo

Loren Balhorn

03/04/2022

El 2 de abril de 1922, reformistas y revolucionarios de tres internacionales rivales se reunieron en Berlín para acordar un programa común. Terminó en un fracaso y fue la última vez en décadas que comunistas y socialdemócratas se encontrarían formalmente como camaradas.

Durante la mayor parte del siglo XX, el movimiento obrero estuvo dividido en dos campos distintos. Aunque tanto la socialdemocracia como el comunismo tienen sus orígenes en la Asociación Internacional de Trabajadores, fundada en Londres en 1864 por Karl Marx y otros radicales, en la década de 1920, las dos corrientes se habían convertido en organizaciones y visiones del mundo rivales. Después de la Segunda Guerra Mundial, representaron lados opuestos en la Guerra Fría. Para la década de 1990, el comunismo como movimiento de masas prácticamente había desaparecido, mientras que la socialdemocracia, aunque todavía era una fuerza política importante, había dejado de ser un movimiento de la clase trabajadora hacía mucho tiempo.

Un final tan anticlimático era impensable para los socialistas hace cien años. Ya fueran socialdemócratas reformistas como Tom Shaw del Partido Laborista de Gran Bretaña, marxistas revolucionarios como el bolchevique Karl Radek o aquellos en algún punto intermedio como el socialista austriaco Friedrich Adler, el socialismo era el único horizonte concebible para el futuro de la humanidad. El movimiento había pasado de ser meros círculos conspirativos a partidos con millones de simpatizantes en el lapso de dos generaciones. La reciente guerra mundial, que le costó a Europa 40 millones de vidas y una destrucción incalculable, aumentó las contradicciones en todo el continente y llevó a los socialistas al poder en varios países: en Rusia a través de una revolución violenta, en Alemania y Austria a través de las urnas.

Sin embargo, la guerra también había llevado la tensión entre reformistas y revolucionarios a un punto crítico. Lo que una vez había sido un solo movimiento ahora se dividió en varios campos enfrentados cuya desunión debilitó a ambos lados y los hizo vulnerables a la cooptación por parte de sus enemigos. Fue en este contexto que, el 2 de abril de 1922, tres delegaciones se reunieron en Berlín en el Reichstag, sede del parlamento alemán. Como lo expresó el socialista austríaco Otto Bauer, el objetivo era “reunir los tres ejércitos en los que lamentablemente se ha dividido el proletariado, para que puedan marchar juntos una vez más contra el enemigo común y, unidos, derrotarlo”.

 

Editor colaborador de Jacobin y coeditor, junto con Bhaskar Sunkara, de Jacobin: Die Anthologie (Suhrkamp, ​​2018).
Fuente:
https://jacobinmag.com/2022/04/conference-three-internationals-1922-division-communists-social-democrats
Traducción:
Enrique García

Subscripción por correo electrónico
a nuestras novedades semanales:

El responsable de tratamiento de tus datos es Asociación SinPermiso y la finalidad del tratamiento es hacerte llegar nuestras novedades. Puedes ejercer tus derechos en materia de protección de datos contactando con nosotros*. Para más información consulta nuestra política al respecto (*ver pie de página).