Damos la bienvenida a la publicación en línea del número 1 de la revista 'Sin Permiso'

En mayo de 2006, pronto hará quince años, apareció el primer número de la revista SinPermiso. Echaba a andar un proyecto editorial y político que, como reza la divisa que acompañaba el título de la revista, aspiraba y sigue aspirando a pensar “la república y el socialismo, también para el siglo XXI”. Poco tiempo antes, se había lanzado un espacio web, www.sinpermiso.info, que tenía que constituir una simple herramienta de apoyo de esa publicación en papel, que constituiría el “corazón” del proyecto. Ocurrió, sin embargo, que la resonancia y difusión de los contenidos que se empezaron a publicar en el espacio web convirtió la revista impresa en el anclaje físico de una iniciativa que, en su formato web, volaba por si sola. Ello no convirtió la revista impresa en una mera pieza de coleccionista: los diecisiete números que, hasta hoy, se han publicado, constituyen un verdadero repositorio de materiales “de fondo”, por lo general de mayor longitud, que no tenían cabida en las entregas semanales que se han venido haciendo desde el espacio electrónico, pero que no por ello resultaban de menor importancia para quienes han llevado las riendas de este proyecto.

No obstante, el conocimiento de los materiales publicados en la edición en papel de SinPermiso es demasiado limitado. Por ello, y también porque, a partir de ahora, el equipo editorial de SinPermiso se va a centrar exclusivamente en el espacio en línea, hemos decidido ir “liberando” los diecisiete números publicados. El lector, la lectora encontrará a continuación la primera de estas entregas: el número 1 de nuestra revista, que nuestros suscriptores y varias librerías recibieron en 2006 y que hoy estará a disposición de todo el mundo en formato PDF. En los meses que siguen, iremos liberando el resto de números que conforman nuestra andadura impresa.

Como quien bucee en él podrá observar, desde el primer número se emplearon considerables esfuerzos para pensar los contenidos de un “socialismo en sentido amplio” que heredase lo mejor del republicanismo democrático moderno y que, como se plantea en el “Propósito de SinPermiso”, que abre el número, incluyera, sin dogmatismos, “a los diversos anarquismos, a los diversos comunismos y a los diversos laborismos que en el mundo han sido y, de uno u otro modo, siguen siendo”. También se trataba de albergar algunos elementos de la mejor ciencia social contemporánea, en sus dimensiones positiva y normativa, lo que ha implicado adentrarse en cuestiones de economía política -sin lugar a dudas, la crisis económica y financiera que se desató en 2008 obligó a hacerlo con ahínco-, de historia social y política, de historia del pensamiento, de filosofía moral y política, de estructura social y análisis de clases, de género, de imperialismo, de análisis de conflictos políticos y territoriales, y un largo etcétera que incluye, también, el estudio de elementos de cultura popular de cuño republicano y socialista o la recepción de resultados relevantes de disciplinas adyacentes a las ciencias sociales. Todo ello, unido siempre a la crítica de cualquier intento de cuestionar una idea de verdad como correspondencia con la realidad con la que este equipo siempre se ha comprometido y que tantas veces ha sido puesta en cuestión por las diversas formas del relativismo posmoderno.

Los diecisiete números tienen una misma estructura. En ellos, el lector, la lectora encontrará, en primer lugar, un amplio apartado dedicado a ensayos de hondo calado; en segundo lugar, unas “notas y apostillas” que ofrecen reflexiones algo más breves, en algunos casos aparentemente anecdóticas, sobre asuntos que hemos considerado siempre relevantes para el proyecto de la revista; más adelante, una sección de entrevistas en profundidad; en algunos números, también un apartado destinado a la recuperación de textos de autores clásicos, de “nuestros clásicos”; y, finalmente, reseñas de obras que nos parecía que había que dar a conocer o comentar. Nos permitimos también sugerir que no se dejen de apreciar las portadas: muchas de ellas -sin ir más lejos, la de este primer número- están preñadas de historia, y todas ellas son verdaderas joyas gráficas.

Se acercan fechas invernales que invitan a cierto recogimiento, quizás en la lectura. Este año, además, las circunstancias de la pandemia obligan a que este recogimiento sea estricto. Ojalá el (re)descubrimiento de este primer SinPermiso “en papel” constituya una buena compañía y, en la medida de lo posible, una fuente de razones para repensar los modos en los que habitamos el mundo. Puede descargarse aquí.

¡Buena lectura!